Los arados de vertederas Larrosa incorporan vertederas “de tiras” o “discontinuas. Especialmente aptas para trabajar en suelos pegajosos y húmedos, ya que la tierra se despega de ellas con mayor facilidad. Se mantienen limpias y brillantes y se reduce la potencia que es necesaria para arrastrar el arado.
Los arados de vertederas Larrosa dejan la tierra más deshecha, con menos terrores, y con el labrado más hueco y esponjoso. Esto permite que se almacene más agua cuando llueve y que aumente la productividad.
Este tipo de vertederas pueden ser de dos tipos: “convencionales” o “romboidales”. La diferencia reside en que las vertederas “romboidales” realizan un corte redondeado de la banda de tierra volteada, similar al que realiza un arado de discos, de tal forma que abren todavía más el surco y se envuelven todavía mejor los residuos de la cosecha anterior, depositándolos en el fondo del surco, de una manera más óptima.
Están formados por rejas con punta reversible, que permiten una mejor penetración del arado en suelos endurecidos. Dichas rejas son de acero “al boro”, el cual es un acero muy competitivo, de gran dureza y tenacidad, y muy resistente a los impactos.
Están diseñados para trabajar en profundidades entre 20 y 30 centímetros.